La Red de Manejo de Plagas (REM), de la Asociación Argentina de Productores en Siembra Directa (Aapresid), lanzó una nueva alerta roja de Amaranthus Hybridus o yuyo colorado. En este caso, por resistencia a Fomesafen (inhibidores de PPO). De esta forma, suma un nuevo modo de acción a la lista de resistencias.
La maleza puede producir hasta 100 semillas y tiene un poder germinativo de hasta 60 %. Por otra parte, la producción de semillas de las malezas se ve poco afectada por la competencia con los cultivos.
En el mundo ya se reportaron 32 poblaciones de Amaranthus hybridus resistentes a cinco grupos de herbicidas: glifosato, hormonales, PSII y PPO. Sobre este último, hasta el momento solo había un registro en Bolivia.
En Argentina, esta maleza es una de las más importantes, ya que se extiende por casi toda la superficie agrícola.
Por primera vez registra resistencia a inhibidores de PPO (Fomesafen)
El reporte de la REM señala que, en el año 2021, el equipo de consultores integrado por Alejandro Bagnolo, Eduardo Cortes y Marcos Mitelsky, junto con el investigador Ignacio Dellaferrera, de ICIAgro-UNL-CONICET, trabajó con tres poblaciones de Amaranthus hybridus cosechadas en lotes próximos a Esperanza, Santa Fe (Argentina). Se evaluó la sensibilidad a Fomesafen (25 % p/v) mediante ensayos de dosis respuesta de laboratorio y de campo, analizando además la sensibilidad de la descendencia.
Como resultado, dos de las tres poblaciones evaluadas requirieron 2,1 y 6,8 veces más herbicidas para reducir el peso a un 50 % y 2,6; y 11,6 veces mayor dosis para reducir en un 50 % el número de individuos que la población restante. Además, una de las tres poblaciones presentó individuos que sobrevivieron a dosis de 2.400 ml/ha de Fomesafen y produjeron descendencia que sobrevive a la dosis de uso. De esta forma, cumplió con todos los criterios para ser considerada resistente al herbicida.
Si bien hay otras herramientas químicas para su control, perder este herbicida post-emergentre inhibidor de PPO representa un gran cambio en la manera en que habitualmente se maneja esta maleza.
Desde la REM destacaron la importancia de estar atentos a las posibles fallas de control e informar. Por otra parte, pensando en la próxima campaña, apuntan a planificar el manejo con la mayor densidad e integración posible, en lo que se refiere a herbicidas y prácticas no químicas.
