El último informe del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA) sobre la producción de granos a nivel global plantea diversas cuestiones importantes, sostiene Federico Morixe, analista de agrofinanzas. En ese sentido, señala que el reporte no solo proyecta un incremento para los precios de los granos como el trigo, el maíz y la soja, sino además deja una advertencia sobre la vulnerabilidad a las condiciones climáticas.
En un mundo globalizado, la producción de granos es vital para la seguridad alimentaria y la economía de muchos países. Por ello, Morixe compartió un análisis detallado de los planteamientos que dejó el último informe del USDA sobre la producción mundial de soja, maíz y trigo. “No solo se pronostica un aumento de los precios de los granos, sino también se advierte sobre su vulnerabilidad a las condiciones climáticas extremas”.
En primer lugar, explica que el informe del USDA correspondiente al mes de octubre predice una reducción en la producción y en las reservas globales de los granos mencionados, como consecuencia del impacto del clima y otros factores. En ese sentido, menciona que se estima 783,43 millones de toneladas de trigo para la campaña 2023-2024, lo que representa 0,4 % menos en relación a lo proyectado en septiembre. Esto, a pesar de un leve aumento estimado para la producción estadounidense, que sin embargo no pudo compensar la caída en otros países, como Australia y Argentina. “Esto condujo a un aumento de 3,3 % en los precios del trigo en Chicago tras la publicación del informe”.
Maíz
Con respecto al maíz, el USDA estima 1 214 millones de toneladas para la campaña 2023-204, similar a lo proyectado el mes pasado. No obstante, en el informe de octubre se redujeron las reservas finales de este cereal en EE.UU. con respecto al publicado en septiembre, lo que provocó un aumento de 2,1 % en los precios en Chicago.
Soja
Además, en el reporte de octubre el USDA calcula una producción de soja de 399,5 millones de toneladas, menor a lo señalado en septiembre. Aunque disminuyen las expectativas para Estados Unidos y Brasil, aumenta para Argentina. A todo esto, tras el informe el precio de la soja registró un incremento de 3,6 % en Chicago.
Impacto del clima
Por otro lado, Federico Morixe menciona que el clima podría ejercer un impacto significativo en la producción de granos de Brasil y Argentina, dos de los principales productores a nivel mundial. En ese sentido, señala que la sequía afectó a las plantaciones de soja y maíz en Brasil, que representan cerca del 30 % de la producción total. Asimismo, en Argentina y Australia, la falta de agua dañó los cultivos de trigo y maíz, que igualmente están con tiempo de recuperación si las lluvias llegan a tiempo.
Además, señala que en este contexto de incertidumbre climática Estados Unidos comenzó a exportar más de lo previsto, mientras que Brasil sembró menos en relación a las proyecciones iniciales. “Esta dinámica podría tener un efecto positivo en los precios de los granos en el mercado de Chicago y en las bases en cada puerto, los cuales hay que trabajar y asegurar por separado en cada momento. No es descabellado pensar en volver a tener bases positivas y precios en Chicago como los de julio 2023, en USD 522, porque no en USD 550 por tonelada y bases también positivas como las del 2022. ¿Las recuerdan?”
Planificación y gestión en un mercado volátil
Ante la compleja situación, la perspectiva equilibrada es esencial, sostiene Morixe. Al respecto, indica que, a pesar de la imprevisibilidad de los factores climáticos y geopolíticos, los precios actuales son históricamente favorables para la soja. Por ello, recomienda planificar y gestionar los precios mediante estrategias como los seguros de precios, herramientas que pueden ayudar a los productores a enfrentar la incertidumbre. “La clave es trabajar de manera organizada y minimizar riesgos en un mercado que, a pesar de su turbulencia, ofrece oportunidades valiosas debido a la demanda sostenida de China por los granos”.
En última instancia, señala que el éxito no radica en predecir el futuro, sino en alcanzar las metas planificadas con información sólida y confiable. En ese sentido, el informe del USDA enfatiza la importancia de comprender y anticipar los efectos del clima en la producción de granos, así como la necesidad de tener estrategias de gestión de precios en un mercado volátil.
