Los efectos climáticos característicos de El Niño comenzaron a sentirse con mayor vigor desde la semana pasada, con lluvias acumuladas en gran parte del país y tormentas intensas que destruyeron cultivos en ciertos puntos del territorio nacional.
Durante la semana pasada varias zonas productivas del país fueron afectadas por tormentas de gran intensidad. En algunos casos, solo alcanzadas por lluvias. Sin embargo, en otros puntos se registraron caídas de granizos que destruyeron por completo algunas parcelas de soja.
En comunicación con nuestro medio, el productor agrícola Robson Affonso, señaló que en la zona de San Alberto (Alto Paraná) la caída de granizos tuvo un efecto severo sobre los cultivos de soja. Por lo tanto, en algunos casos se tendrá que recurrir a la resiembra. “Con eso ya se pierde la oportunidad de la zafriña, porque ya no se llega a tiempo”, explicó.
En algunas fincas, la pérdida causada por los granizos fue del 100 %, en otras el daño llegó al 30 %. Además, se estima que a nivel país la merma generada por los últimos fenómenos climáticos sobre la superficie de soja llega al 10 %, señaló.
Con respecto al avance de la siembra en esta zona productiva, señaló que esta semana tendrían que culminar los trabajos, especialmente si continúan los días soleados. “Quedarán algunas parcelas que requerirán de la resiembra. Pero, sí todo corre dentro de la normalidad, se estima que terminen la próxima semana”, añadió.
Presión de enfermedades
Por otra parte, Affonso mencionó que las enfermedades se encuentran muy bien controladas hasta el momento. En ese sentido, destacó que las parcelas están protegidas por el sistema de siembra directa que se desarrolla, y que deja muy buena cobertura en el suelo. “El problema es cuando no hay cobertura, la lluvia choca directamente con la tierra y salpica a la hoja”.
Mercado
También se refirió a la situación del mercado, que sigue muy volátil. No obstante, señaló que las perspectivas son promisorias. “Creo que llegamos a los USD 400 por tonelada. Nuestro problema sigue siendo el costo de exportación, que sigue muy alto. Se habla de unos USD 110 por tonelada que el productor tiene que pagar”, explicó.
